SERVUS HISPANIARUM REGIS



viernes, 13 de mayo de 2016

REINAS CONSORTES DE ESPAÑA (III): LUISA ISABEL DE ORLEANS

Coat of Arms of Louise Élisabeth of Orléans, Queen Consort of Spain.svg
Armas de Luisa Isabel de Orleans como Reina consorte de España
Diseño: Heralder

Luisa Isabel de Orleans nació en Versalles el 9 de diciembre de 1709. Fue una de las hijas de Felipe, duque de Orleans y regente de Francia durante la minoría de edad de Luis XV y de Francisca María de Borbón, duquesa de Orleans. Luisa Isabel era sobrina nieta del rey Luis XIV de Francia por parte de su padre y nieta de él por su madre. Como miembro de la dinastía reinante, Luisa Isabel era una Princesa de la Sangre de Francia..
Debido a que casi nadie le prestaba antención cuando era niña, Luisa Isabel recibió poca educación y parecía destinada a casarse con algún príncipe alemán o italiano que no fuera muy conocido. Al igual que su hermana menor, Diana, fue educada en un convento. Estuvo muy unida a su hermano, Luis, Duque de Chartres por nacimiento, que, al morir su padre en 1723, heredaría el título de Duque de Orleans.
En 1721, con apenas doce años, contrajo matrimonio por poderes con el Príncipe de Asturias, el futuro rey Luis I de España, que contaba con quince años de edad. A pesar de la fría acogida de la familia real española, especialmente por parte de Isabel de farnesio, la madrastra de su futuro marido, se casó con Luis el 20 de enero de 1722 en la villa ducal de Lerma (Burgos).
Luisa Isabel de Orleans.jpg
Luisa Isabel de Orleans en un retrato de Jean Ranc
Desde su llegada a la Corte de los Borbones españoles, Luisa Isabel fue protagonista de numerosos incidentes, como pasearse sin ropa, corretear por los pasillos y trepar a los árboles; al tiempo que abandonaba su higiene y aspecto, síntomas del trastorno límite de la personalidad (TLP) que padecía.
También se dice que padecía bulimia, pues se negaba a tocar la comida en la mesa, pero luego se escondía y engullía de modo compulsivo todo lo que encontraba a mano, fuera o no comestible. Su comportamiento parecía empeorar con el tiempo, ya que de la noche a la mañana se la veía limpiando con pañuelos: cristales, baldosas, azulejos y tejidos de toda índole en el palacio. Los súbditos allí presentes veían atónitos cómo la soberana se desnudaba, afanándose en limpiar con su vestido los cristales de los salones de Palacio. Su marido, el rey Luis, destrozado, escribía a su padre: "No veo otro remedio que encerrarla lo más pronto posible, pues su desarreglo va en aumento."
Luisa Isabel se convirtió en reina consorte de España al producirse la abdicación de su suegro, el rey Felipe V. el 15 de enero de 1724. El carácter de Luisa Isabel fue el origen de desavenencias entre la pareja real, y la reina llegó en una ocasión a estar arrestada en sus habitaciones durante seis días por su comportamiento.
Pocos meses después de acceder al trono, Luis contrajo la viruela y Luisa Isabel cuidó y permaneció junto a su marido hasta su muerte, el 31 de agosto de 1724. La Reina se contagió de la viruela, pero pudo recuperarse al ser, en su caso, menos maligna. Los reyes Luis I y Luisa Isabel no tuvieron descendencia.
La reina, ya viuda, regresó a Francia por voluntad de la reina Isabel de Farnesio. Tras permanecer en un convento durante dos años, residió el resto de su vida en el parisino Palacio de Luxemburgo. 
Falleció en París el 16 de junio de 1742.

No hay comentarios:

Publicar un comentario